El traumatismo craneoencefálico es un daño cerebral producido por un impacto directo sobre el cráneo que lesiona las células cerebrales, rompe los vasos sanguíneos y crea cambios químicos.
Generalmente, el traumatismo craneoencefálico (TCE) se produce como consecuencia de accidentes automovilísticos, lesiones deportivas, caídas o accidentes laborales.
Aunque no todos los golpes en la cabeza causan traumatismo craneoencefálico; cuando ocurre, puede provocar desde secuelas leves como un breve cambio en la conciencia, hasta secuelas graves como el coma, que puede prolongarse durante meses o en algunos casos la muerte.
Síntomas
Los síntomas del TCE varían según la gravedad de la lesión, entre los más comunes se encuentran:
- Dolor de cabeza
- Zumbido en los oídos
- Confusión
- Mareos
- Deterioro de la memoria
- Visión borrosa
- Cambios en el comportamiento
En casos más graves se puede manifestar:
- Dificultad para hablar
- Náuseas y vómitos
- Debilidad en brazos y piernas
- Problemas con el pensamiento
Diagnóstico
El diagnóstico del TCE implica evaluaciones clínicas, pruebas de imagen como la tomografía computarizada (TC) y resonancia magnética (RM), y la observación de los síntomas y la historia del paciente.
Tratamiento
El tratamiento y el tiempo de recuperación depende de la gravedad de la lesión. Cuando la lesión es leve, el paciente necesita guardar reposo, tomar algunos medicamentos para disminuir el dolor de cabeza y acudir al médico periódicamente para evitar que la lesión empeore.
En casos más graves de traumatismo craneoencefálico, se requiere atención médica de urgencia para mantener al paciente estable y evitar otras lesiones. En algunos casos se puede recurrir a la cirugía para disminuir los daños en los tejidos cerebrales, reparar fracturas o detener el sangrado en el cerebro.