Lo que debes saber sobre el cáncer de mama

El cáncer de mama es una enfermedad causada por la multiplicación sin control de las células de la glándula mamaria, las cuales forman un tumor maligno y se puede presentar en una o en ambas mamas.

• Carcinoma ductal invasivo o infiltrante (CDI): Es el cáncer de mama más común (representa del 70 al 80 % de todos los casos). Se desarrolla en los conductos galactóforos (conductos mamarios) y tiene la capacidad de extenderse al tejido adiposo y a otras partes del cuerpo.
• Carcinoma lobulillar invasivo: Representa del 10 al 15 % de los casos, pero es complicado identificarlo a través de una mastografía. Se origina en las glándulas mamarias (encargadas de producir leche) y puede dañar otros tejidos del cuerpo.
• Carcinoma inflamatorio: Un cáncer poco común (representa menos del 3 % de los casos), pero muy agresivo y, además, evoluciona con rapidez. 
• Enfermedad de Paget de seno: Representa del 1 al 3 % de los casos de cáncer de mama. Afecta la piel del pezón y la areola.
• Angiosarcoma del seno: Se origina en las células que cubren los vasos linfáticos y puede extenderse rápidamente. Por lo general se presenta en pacientes que han recibido tratamiento de radioterapia.

• Edad: La mayoría de las mujeres que desarrollan cáncer de mama son mayores de 50 años.
• Antecedentes familiares: El riesgo de desarrollar esta enfermedad aumenta en las mujeres si tienen familiares cercanos (incluidos hombres) que han sido diagnosticados con cáncer de mama.
• Antecedentes personales de cáncer de mama: Las mujeres que han tenido cáncer de mama pueden presentarlo nuevamente (puede ocurrir en la misma mama o en la otra).
• Historial reproductivo: 

1. Menstruación temprana: Mujeres que iniciaron su ciclo menstrual antes de los 12 años.
2. Menopausia tardía: Mujeres que entran a la menopausia después de los 52 años. 
3. Mujeres que tienen su primer embarazo después de los 35 años o que nunca se han embarazado.

• Terapia de reemplazo hormonal: Las mujeres que usan la terapia hormonal después de la menopausia y por un tiempo prolongado (más de 5 años).
• Exposición a la radiación: Mujeres que han recibido tratamiento con radiación en el pecho o senos.
• Consumo de alcohol: Los altos niveles de etanol aumentan la cantidad de estrógeno en el cuerpo, lo que puede incrementar el riesgo de desarrollar cáncer de mama.
• Tener sobrepeso u obesidad y no realizar actividad física.

Algunos signos o síntomas pueden ser:

• Un bulto en la mama o la axila.
• Aumento de grosor, hinchazón, irritación, escamosidad o presencia de hoyuelos en la mama.
• Un cambio en el tamaño o forma de la mama.
• Secreción del pezón que se presenta de forma repentina (puede contener sangre).
• Hundimiento del pezón.
• Dolor en cualquier parte de la mama.

 Los síntomas dependen de cada paciente, incluso algunas mujeres que no presentan ninguno.

Es importante que las mujeres realicen una autoexploración mamaria a partir de los 20 años para identificar cualquier señal de alerta. 

Por otro lado, existen diversas pruebas que ayudan a diagnosticar el cáncer de mama:

• Mastografía: Un estudio que todas las mujeres se deben realizar anualmente después de los 40 años de edad.
• Ultrasonido mamario: Permite analizar alguna región en particular de la mama o diferenciar los nódulos sólidos de los quísticos, algo que no puede hacer la mastografía.
• Resonancia magnética (RM): Se utiliza en pacientes que tienen un alto riesgo de presentar cáncer de mama. Con la ayuda de imanes y ondas de radio, toma fotografías de las mamas.
• Examen clínico de la mama: Es un examen físico realizado por un médico. Consiste en la exploración de las mamas, las axilas y la zona de la clavícula para detectar bultos o anormalidades.
• Biopsia: Esta prueba se realiza cuando otros exámenes como la mastografía o el examen físico muestran signos de cáncer de mama. Es un procedimiento en el que se extrae una pequeña muestra de tejido para posteriormente examinarlo con un microscopio o realizar otras pruebas.

El cáncer de mama se clasifica en etapas (estadios) que van del 0 al 4 dependiendo la gravedad de la enfermedad.

• Etapa 0: Es cuando el cáncer de mama no es invasivo y solo involucra a un pequeño número de células cancerosas o no cancerosas con anomalías.
• Etapa 1: Las células cancerosas comienzan a invadir el tejido mamario y el tumor puede medir hasta 2 cm.
• Etapa 2: El tumor puede medir hasta 5 cm y algunos ganglios linfáticos pueden llegar a afectarse.
• Etapa 3: El tumor mide más de 5 cm, los ganglios linfáticos ya están afectados y el cáncer puede extenderse a la piel o a la pared torácica.
• Etapa 4: El tumor puede ser de cualquier tamaño y ya se ha extendido a otras partes del cuerpo (metástasis) además de la mama.

El tratamiento depende del tipo de cáncer de mama y lo avanzado que se encuentre. La radioterapia (aplicación de radiación ionizante en tumores malignos) y la cirugía, son tratamientos locales, por lo que su efecto es menos invasivo y puede ser efectivo si el cáncer no se ha extendido.  

La quimioterapia (uso de medicamentos administrados por vía intravenosa u oral para combatir el cáncer), la terapia hormonal (tratamiento que impide que las células cancerosas crezcan), la terapia dirigida (administración de medicamentos que atacan anormalidades específicas dentro de las células cancerosas) y la inmunoterapia (estimula el sistema inmunitario para que destruya las células cancerosas con mayor eficacia) son tratamientos sistémicos, es decir, pueden alcanzar células cancerosas en casi cualquier parte del cuerpo.

Existen tres métodos para diagnosticar de forma temprana esta enfermedad: la autoexploración, el ultrasonido y la mastografía.

Se recomienda que la autoexploración se inicie desde que las glándulas mamarias llegan a su desarrollo total, es decir, alrededor de los 20 años. Se debe realizar mensualmente, una semana después de haberse presentado la menstruación.

El ultrasonido es otra alternativa preventiva. Se recomienda realizarlo anualmente a partir de los 30 años, aunque se puede realizar antes, sobre todo si existe algún factor de riesgo como la historia familiar. 

En el caso de las mujeres mayores de 40 años, la mejor forma de prevenir esta enfermedad es a través de la mastografía, un estudio que permite identificar en etapas tempranas un tumor en la mama antes de que se presente alguna manifestación en la paciente. 

Es vital que las mujeres acudan a un especialista en el momento que detecten alguna alteración en sus glándulas mamarias. En Hospital Angeles Health System contamos con un excelente servicio de imagenología mamaria que no solo realiza mastografías, sino también ultrasonidos y algunos procedimientos intervencionistas como biopsias guiadas por imagen, especialistas capacitados y alta tecnología para diagnosticar y tratar el cáncer de mama.

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