La bronquitis es una inflamación de los bronquios, los conductos que llevan el aire a los pulmones.
Es importante destacar que existen dos tipos principales de bronquitis:
- Bronquitis aguda: Es una enfermedad a corto plazo que generalmente se presenta después de una infección viral, como un resfriado. Los síntomas de la bronquitis aguda suelen durar unas pocas semanas y luego desaparecer.
- Bronquitis crónica: Es una afección a largo plazo que puede durar semanas, meses o incluso años. Por lo general, es causada por el tabaquismo o la exposición a irritantes ambientales, como la contaminación del aire. Sus síntomas suelen ser persistentes y recurrentes.
Los síntomas de la bronquitis pueden variar en gravedad, aunque comúnmente incluyen:
- Tos: Es uno de los síntomas más comunes de la bronquitis. Puede ser seca al principio y luego causar expulsión de esputo (flema) de color amarillo, verde o blanco.
- Dificultad para respirar: Puede generar dificultad para respirar, especialmente durante la actividad física.
- Fiebre: En algunos casos se puede presentar fiebre.
- Congestión en el pecho: Puede experimentar una sensación de opresión o congestión en el pecho debido a la inflamación de los bronquios.
- Fatiga: La bronquitis a menudo va acompañada de fatiga y debilidad general.
- Dolor de garganta: Algunas personas con bronquitis pueden tener dolor de garganta como síntoma inicial.
- Secreción nasal: En algunos casos, la bronquitis puede estar acompañada de secreción y congestión nasal.
- Ronquera: Puede causar ronquera debido a la irritación de las vías respiratorias
Si presentas síntomas de bronquitis, especialmente fiebre alta, dificultad para respirar grave o si tus síntomas no mejoran en un plazo razonable de tiempo, es importante buscar atención médica. Un especialista puede diagnosticar la causa y proporcionarte el tratamiento adecuado.