Una infección que afecta tanto a niños como a adultos y que requiere un tratamiento adecuado.
El interior de la anatomía facial está configurado por varios de estos senos o cavidades que rodean la nariz. Estos se comunican entre sí y con las fosas nasales. En condiciones normales, deberían estar llenos de aire. Pero cuando se produce una inflamación, estos se obstruyen.
Los síntomas pueden variar dependiendo de la gravedad de la inflamación de los senos paranasales. Algunos de ellos son:
Para obtener un diagnóstico correcto, el médico realizará un examen físico acompañado de algunas pruebas cutáneas de alergia, radiografías de los senos paranasales e incluso una tomografía computarizada.
La mayoría de las infecciones que provoca la sinusitis generalmente se pueden controlar con medicamentos, además de algunos antibióticos cuando se ha diagnosticado que este padecimiento está relacionado con una infección bacteriana.
El tratamiento puede incluir, en algunos casos, inmunoterapia, medicamentos antiinflamatorios, descongestionantes y medidas de control ambiental. Cuando el tratamiento no es eficaz, es posible recurrir a la cirugía para mejorar el drenaje nasal.
Es importante que las personas con problemas en los senos paranasales o alergias, eviten el humo del tabaco y otros contaminantes del aire. Además, el consumo de bebidas alcohólicas también puede provocar que las membranas nasales se inflamen.
Asimismo, las personas propensas a padecer sinusitis pueden presentar problemas al nadar en albercas que contengan mucho cloro, puesto que esto puede irritar las membranas de la nariz y los senos paranasales.
Si sospechas que tu problema de sinusitis se encuentra relacionado con el polvo, polen, moho o con algún alimento, es importante consultar a tu médico. A través de diversas pruebas se puede determinar la causa de la alergia y encontrar un tratamiento adecuado para reducir o eliminar los síntomas.