La epilepsia es un trastorno neurológico crónico que afecta a personas de todas las edades, caracterizado por convulsiones recurrentes.
La epilepsia ocurre cuando los cambios en el tejido cerebral hacen que el cerebro esté demasiado excitable o irritable. Como resultado de esto, el cerebro envía señales anormales, ocasionando convulsiones repetitivas e impredecibles.
A grandes rasgos, podemos distinguir dos tipos de crisis: la generalizadas, que afectan toda la superficie del cerebro; y las crisis focales, en las que la descarga tiene su origen en una región concreta, extendiéndose al resto de la corteza cerebral.
La epilepsia daña estructuras del cerebro como el lóbulo frontal, el lóbulo temporal, el lóbulo parietal y el lóbulo occipital, enviando a cada uno señales anormales y manifestaciones particulares de la función de cada lóbulo.
Síntomas
Los síntomas de un ataque de epilepsia son:
- Confusión temporal
- Episodios de ausencia
- Rigidez muscular
- Movimientos espasmódicos incontrolables de brazos y piernas
- Pérdida del conocimiento
- Síntomas psicológicos como miedo, ansiedad o sensación de déjà vu.
¿Qué hacer ante una crisis epiléptica?
Si tu hijo tiene una crisis epiléptica, no trates de sujetarlo ni evitas que se mueva; no pongas nada en su boca porque podrías lesionar los dientes o la mandíbula. No intentes darle respiración de boca a boca. Coloca al niño de lado en una superficie plana donde no se lastime y comunícate de inmediato con su médico tratante.
La epilepsia es una enfermedad que no se cura, pero que la mayoría de las veces se logra controlar. Solo el 70 % de los pacientes con epilepsias generalizadas idiopáticas se curan.
Las personas más propensas a tener epilepsia son pacientes con asfixia neonatal e infecciones congénitas como toxoplasmosis, citomegalovirus, rubéola; malformaciones cerebrales, tumores cerebrales, traumatismos craneoencefálicos, hemorragia cerebral e infartos cerebrales.
Tratamiento
El estilo de vida de tu pequeño con epilepsia debe guiarse por pautas de seguridad indicadas por su neurólogo. El tratamiento se basa en medicamentos anticonvulsivantes y, en algunas ocasiones, cirugía de epilepsia. El apoyo familiar es muy importante; ustedes y el especialista formarán un equipo de apoyo para que tu hijo disfrute su infancia.
Dr. Celia Trujillo de León
Pediatría, Neuropediatría
Hospital Angeles Metropolitano
Cédula: 3412389