La acidez estomacal puede causar lesiones en el esófago si se produce de manera recurrente y no se trata adecuadamente.
La acidez estomacal generalmente se relaciona con la alimentación y la postura de una persona, aunque también puede presentarse como síntoma del reflujo gastroesofágico. No obstante, existen otros factores que también pueden contribuir: el sobrepeso, el embarazo y el fumar.
El síntoma que caracteriza a la acidez estomacal es la sensación de ardor (una especie de quemazón interior que recorre el aparato digestivo desde el estómago hasta la garganta) y que, además de dolor, puede provocar lesiones en el esófago si no se atiende adecuadamente.
Tratamiento
El tratamiento se centra en prevenir la producción de ácido en el estómago o neutralizarlo; para ello, algunos medicamentos ayudan a reducir la cantidad de ácido producido en el estómago y a prevenir el ardor, otros neutralizan el pH ácido del estómago y alivian los síntomas rápidamente.
Es común que las personas que padecen acidez recurran a la automedicación con antiácidos, lo que puede resultar peligroso. Lo más recomendable es consultar al médico.
Prevención
En estos casos es importante evitar los alimentos, bebidas y medicamentos que puedan irritar la mucosa del estómago, tales como:
- Alimentos fritos o muy grasosos
- Chocolate
- Menta
- Alcohol
- Café
- Bebidas gaseosas
- Jugos o bebidas cítricas
- Salsa de tomate
- Mostaza
- Algunos medicamentos para combatir el dolor, por ejemplo ácido acetilsalicílico.
Para evitar la acidez estomacal es indispensable reducir las porciones de comida, evitar fumar, mantener un peso adecuado, procurar cenar de dos a tres horas antes de acostarse y evitar utilizar ropa muy ajustada, especialmente en la cintura.