Suicidio en adolescentes, ¿cómo prevenirlo?
La atención temprana puede evitar intentos o la consumación del suicidio.
Al encontrarse en una etapa difícil de sus vidas, los adolescentes representan el grupo más vulnerable para el suicidio, ya que enfrentan una lucha interna y experimentan situaciones de estrés, confusión, inseguridad, incertidumbre y presión social.
Además de que en la etapa de la adolescencia pueden existir factores como la depresión, ansiedad y el consumo de sustancias adictivas. Otro factor común de la conducta suicida en adolescentes son los trastornos de personalidad.
Al manifestarse una alteración llamada trastorno límite de la personalidad, que se caracteriza por un problema de carácter que se expresa en las emociones, dificultad para frenar los impulsos y conducta agresiva a sí mismo o a los demás, ocasionando incluso lesiones.
Este grupo de pacientes son los que repiten con más frecuencia la conducta suicida por no poder frenar el impulso de la agresión y más cuando se asocia con factores de depresión, angustia, alteraciones mentales, discordia familiar, ruptura amorosa, enfermedad, problemas escolares, laborales, económicos y otros.
¿Qué provoca el suicidio en los adolescentes?
Entre los adolescentes un problema recurrente es sentirse triste. En México, el 71.6 % manifiesta que la mayor parte se siente de esa manera; además el 6.3 % ha tenido ideas suicidas a lo largo de su vida.
En tanto, el 5.3 % de la población adolescentes menciona haberse hecho daño con la finalidad de quitarse la vida, cifra que ha aumentado en los últimos años. Cuando una persona repite la idea de quitarse la vida, cada intento aumenta el peligro de consumar el suicidio al utilizar métodos más letales.
Los métodos más comunes del intento suicida son la utilización de un instrumento punzocortante, lanzarse al vacío, ahorcamiento e intoxicación con medicamentos.
El acoso escolar y el suicidio
En México, 7 de cada 10 niños o adolescentes sufren bullying o acoso escolar todos los días. Los estudiantes que son víctimas no suelen defenderse y tampoco lo hablan con sus padres o maestros por temor. Esta situación causa daños emocionales y sociales, por lo que si no es tratado a tiempo puede derivar en un intento de suicidio.
Aunque el acoso escolar es algo que no se puede prevenir, es fundamental que exista una buena comunicación entre padres e hijos. De igual manera es importante reconocer las señales de alerta:
- No quiere ir a la escuela.
- Cambios de conducta en el uso de dispositivos tecnológicos: a través de las redes sociales pueden recibir amenazas, insultos o chantajes.
- Cambios en los hábitos de sueño y alimentarios.
- Se vuelve más reservado.
- Problemas de autoestima.
- Bajo rendimiento escolar.
Los adolescentes que tienen la idea del suicidio requieren gran apoyo familiar, además de atención psicológica, y en algunos casos psiquiátrica. En Hospital Angeles Health System contamos con especialistas reconocidos que brindan atención integral en el manejo de estos pacientes. El suicidio es un tema prevenible que tiene que ser abordado por expertos.
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