Las enfermedades respiratorias pueden ser muy diversas de acuerdo al lugar donde se presentan dentro de la exploración física de cada paciente.
Las más comunes en niños son la rinofaringitis, también conocida como resfriado común; faringitis, que es la infección que se presenta a nivel de la faringe. Podemos tener enfermedades a nivel de los oídos (otitis), a nivel de los bronquios (bronquitis) y la presencia de neumonía, que afecta directamente a los pulmones.
Otra enfermedad muy común es la laringotraqueitis, que es cuando algún paciente pediátrico presenta tos aguda (los papás pueden referir tos de perro o foca).
Cada una de estas enfermedades puede tener una etiología (origen) viral o bacteriana que únicamente se puede determinar por medio de la exploración clínica. Mientras la afección sea más baja, podemos hablar de una gravedad y una presencia de síntomas diferentes.
De entrada el paciente puede presentar secreción nasal (rinorrea), no importa si es transparente, de color verdoso o amarillento; puede tener fiebre, tos y malestar general.
Una señal de alarma siempre será la dificultad respiratoria, por lo que se requiere llevar al niño inmediatamente al médico.