La anemia por deficiencia de hierro se presenta cuando los glóbulos rojos o la hemoglobina (la proteína que transporta el oxígeno) presentan valores inferiores a los normales.
Se trata de un tipo de anemia común que se presenta si el organismo no tiene suficiente hierro para producir hemoglobina en cantidad adecuada. La hemoglobina es una proteína presente en los glóbulos rojos que transporta oxígeno desde los pulmones a los tejidos y órganos del cuerpo.
La anemia por deficiencia de hierro se presenta primordialmente en mujeres y niños. Las mujeres en el embarazo son principalmente propensas a presentarla, lo que aumenta las probabilidades de que tengan complicaciones durante la gestación y en el momento del parto.
¿Cómo se origina?
Las causas de la anemia por deficiencia de hierro pueden incluir:
- Dietas deficientes en hierro: Consumir una dieta baja en alimentos ricos en hierro, como carnes rojas, legumbres, espinacas, huevo y frutos secos, puede llevar a una deficiencia de hierro.
- Pérdida de sangre: Hemorragias crónicas o pérdida de sangre significativa a través de menstruación abundante, úlceras gastrointestinales, hemorroides o cualquier otro trastorno que cause sangrado puede resultar en pérdida de hierro.
- Problemas de absorción: Algunas condiciones médicas, como la enfermedad celíaca, la enfermedad inflamatoria del intestino o la cirugía gástrica, pueden interferir con la absorción adecuada de hierro en el tracto digestivo.
- Aumento de las necesidades de hierro: Durante ciertas etapas de la vida, como el embarazo y la lactancia, o en el caso de un crecimiento rápido durante la infancia y la adolescencia, las necesidades de hierro pueden aumentar y, si no se satisfacen, pueden causar una deficiencia.
Síntomas de la anemia por deficiencia de hierro
Los pacientes con este tipo de anemia pueden presentar diversos síntomas, tales como:
- Fatiga
- Debilidad
- Palidez
- Dificultad para concentrarse
- Irritabilidad
- Palpitaciones cardiacas
- Falta de aliento
Para un diagnóstico adecuado se deben realizar análisis de sangre para evaluar los niveles de hemoglobina y ferritina (un indicador de las reservas de hierro en el cuerpo).
Tratamiento de la anemia por deficiencia de hierro
El tratamiento implica generalmente la suplementación con hierro y, en algunos casos, cambios en la dieta para incluir alimentos ricos en hierro. En casos más severos o cuando la deficiencia de hierro es causada por una condición subyacente, pueden ser necesarios tratamientos adicionales.
Asimismo, es importante realizar análisis de sangre periódicos para evaluar los niveles de hemoglobina y ferritina y ajustar la dosis de suplementos de hierro, según sea necesario.
En casos graves o cuando es necesario aumentar rápidamente los niveles de hemoglobina, puede ser necesaria una transfusión de sangre.
Es importante tener en cuenta que el tratamiento de la deficiencia de hierro debe ser supervisado por un especialista, ya que la administración inadecuada de hierro puede ser perjudicial. Además, en casos necesarios, es esencial abordar la causa subyacente de la deficiencia de hierro para evitar recurrencias en el futuro.