El síndrome de taquicardia postural ortostática se caracteriza por un aumento anormal del ritmo cardíaco al cambiar de posición, especialmente al ponerse de pie.
El síndrome de taquicardia postural ortostática (STPO) es más común que se presente durante la pubertad, pero puede desarrollarse a cualquier edad. Las personas diagnosticadas con este síndrome se sienten aturdidas o mareadas después de haberse levantado. Esto puede ocurrir de repente o hasta unos minutos después de levantarse.
Las causas exactas del Síndrome de Taquicardia Postural Ortostática (STPO) no siempre son claras y pueden variar entre individuos. Sin embargo, se han identificado algunas posibles causas y factores desencadenantes asociados, como:
- Disfunción del Sistema Nervioso Autónomo (SNA): El STPO a menudo se asocia con una disfunción en el sistema nervioso autónomo, que regula funciones automáticas del cuerpo, como la frecuencia cardíaca, la presión arterial y la digestión. La incapacidad del SNA para ajustar adecuadamente la frecuencia cardíaca al cambiar de posición es un factor clave en el STPO.
- Desregulación de la presión arterial: Problemas en la regulación de la presión arterial, como la hipotensión ortostática, pueden contribuir al STPO. Esto puede deberse a la falta de respuesta adecuada de los vasos sanguíneos y el corazón al adoptar una posición vertical.
- Trastornos autoinmunes: Algunas investigaciones sugieren que el STPO puede estar vinculado a trastornos autoinmunes, donde el sistema inmunológico del cuerpo ataca por error tejidos propios, afectando el funcionamiento normal del sistema nervioso autónomo.
- Hipovolemia: La falta de volumen sanguíneo, conocida como hipovolemia, puede desencadenar o agravar los síntomas del STPO. La pérdida excesiva de líquidos debido a la deshidratación o a otras condiciones médicas puede contribuir a la inestabilidad hemodinámica.
- Síndrome de fatiga crónica: Existe una superposición significativa entre el STPO y el síndrome de fatiga crónica (SFC). Algunas personas con SFC también presentan síntomas de STPO, y se ha sugerido que ambos trastornos pueden compartir mecanismos subyacentes.
- Factores genéticos: Se ha observado que en algunos casos hay una predisposición genética al STPO. Antecedentes familiares de trastornos del sistema nervioso autónomo pueden aumentar el riesgo de desarrollar la condición.
- Infecciones virales: En algunos casos, el STPO ha sido precedido por infecciones virales, lo que ha llevado a la especulación sobre una posible conexión entre ciertas infecciones y el desarrollo del síndrome.
Síntomas
El principal síntoma es el aumento de la frecuencia cardiaca (taquicardia) después de ponerse de pie. Sin embargo, existen otros síntomas que se relacionan como:
- Mareos o aturdimiento
- Visión borrosa
- Náuseas o vómitos
- Desmayos (el cerebro y otros órganos no reciben suficiente sangre)
- Sentirse ansioso
- Intolerancia al ejercicio
- Dolor de cabeza
- Insomnio
- Dolor en el pecho o el abdomen
- Confusión
- Periodos menstruales dolorosos y prolongados
- Fatiga
- Dificultad para respirar
- Color púrpura rojizo en pies o piernas
Los pacientes con síndrome de Ehlers-Danlos (SED) es frecuente que lo padezcan.
Diagnóstico
El diagnóstico del STPO puede ser complicado, debido a que los síntomas pueden superponerse con otras condiciones médicas. Las pruebas de inclinación, donde el paciente es inclinado hacia arriba mientras se monitoriza la respuesta del cuerpo, son comunes en el proceso diagnóstico.
Tratamiento
No existe una cura; sin embargo, se pueden disminuir los síntomas al:
- Tomar medicamentos recetados por el médico que ayuden a elevar la presión arterial o reducir la frecuencia cardiaca.
- Beber abundantes líquidos y aumentar la ingesta de sal.
- Realizar activador física.
- Realizar comidas pequeñas a lo largo del día y disminuir el consumo de cafeína y alcohol.
- Dormir lo suficiente.
- Usar prendas de compresión para ayudar a que la sangre circule correctamente.
La mayoría de las personas con síndrome de taquicardia postural ortostática mejoran con el tratamiento y un cambio en el estilo de vida. Si los síntomas no disminuyen, es importante consultar al especialista.