La enfermedad celíaca es un trastorno autoinmune crónico que afecta principalmente al intestino delgado. Se desencadena en personas genéticamente predispuestas cuando consumen gluten, una proteína presente en cereales como el trigo, el centeno y la cebada.
Esta enfermedad se puede manifestar a cualquier edad y, si no se trata, puede generar graves complicaciones. La enfermedad celíaca es una reacción inmunológica del cuerpo ante la ingesta de gluten.
Cuando las personas con esta afección consumen alimentos que contienen gluten, el sistema inmunológico reacciona de manera exagerada, dañando las vellosidades del intestino delgado, que son estructuras esenciales para la absorción de nutrientes. A medida que las vellosidades se deterioran, el intestino pierde su capacidad de absorber nutrientes adecuadamente, lo que puede llevar a problemas nutricionales y una amplia gama de síntomas.
Características principales de la enfermedad celíaca
- Condición autoinmune: El cuerpo, en un intento de protegerse del gluten, produce una respuesta inmunitaria que daña sus propios tejidos, específicamente las vellosidades intestinales.
- Predisposición genética: La enfermedad celíaca está asociada con los genes HLA-DQ2 y HLA-DQ8. Tener estos genes no garantiza desarrollar la enfermedad, pero sí aumenta el riesgo.
- Daño intestinal: La respuesta autoinmune al gluten provoca una inflamación crónica en el intestino delgado, dañando las vellosidades que permiten la absorción de nutrientes.
- Crónica: La enfermedad es una afección para toda la vida. No se puede curar, pero se puede controlar con una dieta estricta sin gluten.
Síntomas de la enfermedad celíaca
Los síntomas de la enfermedad celíaca pueden variar ampliamente de una persona a otra y pueden afectar diferentes sistemas del cuerpo. Se dividen en síntomas gastrointestinales y no gastrointestinales.
Síntomas gastrointestinales
- Diarrea crónica: Es uno de los síntomas más comunes, especialmente en niños.
- Dolor y distensión abdominal: Las personas pueden experimentar dolor en el abdomen, gases y sensación de hinchazón.
- Pérdida de peso: La malabsorción de nutrientes puede causar una pérdida de peso inexplicada.
- Vómitos: Algunos pacientes, especialmente niños, pueden presentar vómitos.
- Estreñimiento: Aunque menos común que la diarrea, algunos pacientes pueden experimentar estreñimiento.
Síntomas no gastrointestinales
- Fatiga y debilidad: La deficiencia de nutrientes, como el hierro, puede causar fatiga extrema.
- Anemia: La malabsorción de hierro y otros nutrientes puede provocar anemia.
- Dermatitis herpetiforme: Una manifestación cutánea de la enfermedad celíaca que causa erupciones y picazón en la piel.
- Dolores articulares: Algunas personas experimentan dolores o inflamación en las articulaciones.
- Problemas neurológicos: La enfermedad celíaca también puede estar relacionada con síntomas como neuropatía periférica o “niebla mental”.
- Problemas de crecimiento: En los niños, la malabsorción de nutrientes puede llevar a un crecimiento deficiente, retraso en la pubertad y baja estatura.
- Osteoporosis: La deficiencia de calcio y vitamina D, común en la celiaquía, puede conducir a la pérdida de densidad ósea.
Diagnóstico de la enfermedad celíaca
El diagnóstico de la enfermedad celíaca implica varias pruebas que permiten confirmar la presencia de esta afección:
- Análisis de sangre: Se busca detectar anticuerpos específicos, como la anti-transglutaminasa tisular (tTG) y la anti-endomisio (EMA). Un nivel alto de estos anticuerpos sugiere una reacción al gluten.
- Biopsia intestinal: Si los análisis de sangre son positivos, el siguiente paso es una biopsia del intestino delgado. Esto implica tomar pequeñas muestras de tejido para observar si hay daño en las vellosidades.
- Pruebas genéticas: Se pueden realizar pruebas para determinar si el paciente porta los genes HLA-DQ2 o HLA-DQ8, que están asociados con la enfermedad celíaca.
Es importante que estas pruebas se realicen mientras la persona sigue consumiendo gluten, ya que eliminarlo de la dieta puede alterar los resultados.
Tratamiento de la enfermedad celíaca
El tratamiento efectivo para la enfermedad celíaca es seguir una dieta estricta sin gluten de por vida. Esto implica eliminar por completo todos los alimentos y productos que contengan trigo, cebada, centeno y cualquier derivado. Algunos puntos clave del tratamiento son:
- Dieta libre de gluten: Los pacientes deben evitar alimentos procesados que puedan contener gluten oculto y prestar especial atención al etiquetado de productos. Además de los cereales mencionados, algunos aditivos y conservantes también pueden contener trazas de gluten.
- Monitoreo médico: Las personas diagnosticadas con celiaquía deben tener un seguimiento regular para evaluar su recuperación intestinal y el estado nutricional.
- Suplementación: En algunos casos, es necesario suplementar ciertas vitaminas y minerales que no se han absorbido adecuadamente, como hierro, calcio, vitamina D o vitamina B12.
- Educación nutricional: Consultar a un nutricionista especializado en enfermedad celíaca puede ser esencial para aprender a gestionar la dieta y evitar contaminaciones cruzadas con gluten.
Complicaciones del tratamiento inadecuado
No seguir adecuadamente la dieta sin gluten puede llevar a complicaciones graves:
- Desnutrición: La continua malabsorción de nutrientes puede provocar desnutrición severa, incluso si la persona parece estar comiendo suficiente.
- Osteoporosis: La pérdida de densidad ósea es común en personas celíacas no tratadas.
- Infertilidad: Tanto en hombres como en mujeres, la celiaquía no tratada puede afectar la fertilidad.
- Riesgo de cáncer: Las personas con celiaquía tienen un mayor riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer intestinal si no siguen una dieta sin gluten.
La enfermedad celíaca es un trastorno autoinmune serio que requiere un diagnóstico y tratamiento adecuado para evitar complicaciones graves. La adherencia estricta a una dieta sin gluten es clave para controlar los síntomas y evitar el daño intestinal.
Con un manejo adecuado, los pacientes con celiaquía pueden llevar una vida saludable y plena. Es importante que las personas con sospecha de esta condición busquen atención médica y sigan las indicaciones de un especialista para mantener su bienestar.