Celulitis, ¿qué es y cómo se puede tratar?

Cuerpo de mujer de la cintura a las rodillas, ropa interior negra.

La celulitis es una alteración del tejido conjuntivo. Este tejido, ubicado bajo la piel, actúa como un soporte entre nuestras células. En su estado normal, es flexible y está compuesto por células, fibras dispersas y líquido que garantiza la cohesión entre los distintos órganos.

La celulitis es una condición dermatológica que afecta a muchas personas, especialmente mujeres, y se caracteriza por la apariencia de hoyuelos, protuberancias o piel con aspecto de “piel de naranja” en áreas como los muslos, las caderas, los glúteos y el abdomen. Aunque no representa un riesgo para la salud física, puede tener un impacto significativo en la autoestima y la confianza de quienes la padecen.

La formación de celulitis se debe a la acumulación de tejido adiposo bajo la piel, que ejerce presión sobre el tejido conectivo fibroso. Esto crea una apariencia de irregularidad en la superficie de la piel. Factores como la genética, el género, los cambios hormonales, la mala circulación sanguínea, la falta de actividad física y la dieta desempeñan un papel crucial en su desarrollo.

La celulitis estética se manifiesta típicamente como:

  • Hoyuelos y protuberancias: La piel adquiere una textura irregular, similar a la piel de una naranja, especialmente visible al presionar o al estar de pie.
  • Ubicación predominante: Aparece con mayor frecuencia en áreas donde se acumula grasa, como muslos, glúteos, caderas y abdomen.
  • Influencia de la circulación y la piel: La mala circulación sanguínea y la fragilidad del tejido conectivo pueden agravar su apariencia.

Aunque no existe una cura definitiva para la celulitis, existen numerosas opciones para mejorar su apariencia:

  • Cambios en el estilo de vida: Incluir una dieta equilibrada, ejercicio regular y mantener un peso corporal saludable puede reducir su aparición.
  • Tratamientos tópicos: Geles, cremas y lociones que contienen cafeína, retinol, o ingredientes que promueven la circulación sanguínea pueden ayudar temporalmente a mejorar la apariencia de la piel.
  • Procedimientos cosméticos: Terapias como la liposucción, la radiofrecuencia, los tratamientos con láser y la mesoterapia pueden proporcionar resultados más duraderos al romper los depósitos de grasa y estimular la producción de colágeno.
  • Cirugía: Es un tratamiento radical más agresivo. No se recomienda a todo tipo de pacientes.

Es importante recordar que la celulitis estética es común y no debe considerarse una imperfección grave ni un reflejo de la salud general de una persona. El manejo de la celulitis puede variar según las necesidades y preferencias individuales, y es importante buscar el consejo de un dermatólogo o especialista en estética para determinar el tratamiento más adecuado. Con el enfoque adecuado y la paciencia, muchas personas pueden mejorar significativamente la apariencia de la celulitis estética y sentirse más seguras en su propia piel.

Para que la celulitis aparezca existen varios factores, entre ellos:

  • Alteraciones en los vasos sanguíneos
  • Falta de irrigación del tejido graso
  • Cambios en el intercambio de nutrientes
  • Acumulación de desechos metabólicos

Depositphotos / Captura Images

  • Es más común en mujeres que hombres
  • Edad: Debido al envejecimiento, la piel pierde elasticidad
  • Sobrepeso
  • Herencia
  • Cambios hormonales
  • Embarazo
  • Alimentación inadecuada y un estilo de vida inactivo
  • Grado 1: En esta etapa los vasos sanguíneos se estrechan, provocando que la circulación sea más lenta y la nutrición de las células sea deficiente, por lo que favorece la acumulación de desechos y líquido en los espacios entre las células e inflamación de los tejidos. Se presenta principalmente en caderas y muslos, la superficie de la piel se ve lisa mientras la persona se encuentra de pie o acostada. Al pellizcar la zona se muestran arrugas o surcos en la piel sin que realmente aparezca la llamada “piel de naranja”. Este estado es bastante común en mujeres delgadas.
  • Grado 2: Hay alteración generalizada de la microcirculación, con fibrosis o endurecimiento del tejido que atrapa los vasos sanguíneos y las células grasas de la zona. La piel se ve lisa si la mujer está acostada, pero el fenómeno de la piel de naranja aparece en forma espontánea cuando se pone de pie. Es común en mujeres entre los 35 y 40 años o que tienen sobrepeso.
  • Grado 3: La fibrosis aumenta y se condensa formando una cápsula resistente que engloba y abraza a las células grasas. Esta formación se denomina micronódulo. En esta condición la piel de naranja se da espontáneamente tanto acostada como de pie, es muy común después de la menopausia y si el paciente tiene obesidad.
  • Grado 4: Se caracteriza por la fusión de varios micronódulos entre sí, los que van a dar origen al macronódulo, que es doloroso y palpable.

Los grados 1, 2 y 3 son médicamente controlables, mientras que el 4 puede ser irreversible por ser resistente a todo tipo de tratamiento.

Existen algunas medidas que pueden prevenirla:

  • Cuida tu alimentación: Sigue una alimentación equilibrada rica en proteínas. No es recomendable comer entre comidas, evita la sal en exceso, y limita el consumo de alcohol, cafeína y tabaco.
  • Bebe suficiente agua: Cuando menos 8 vasos de agua natural al día.
  • Realiza actividad física: El ejercicio físico, aunque sea en forma moderada te ayudará a mantener a raya este problema. Si no tienes tiempo para una rutina de gimnasio, una caminata de 20 minutos, tres veces por semana es recomendable para mantener un buen estado de salud.

La celulitis es un problema que se puede reducir con algunas medidas, pero solo un médico, basado en su estado físico y de salud, te puede recomendar el tratamiento más adecuado. Te recomendamos consultar a un especialista.

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