La profesión de médico es una de las más antiguas en la historia de la humanidad; el Juramento de Hipócrates se escribió en el siglo V antes de Cristo y desde entonces se definió la esencia de lo que constituye la profesión médica.
Solo basta leer algunas partes del Juramento en las cuales se resume el origen y la base de la profesión médica. “Por Apolo médico y Esculapio, juro: por Higeia, Panacea y por todos los dioses y diosas a quienes pongo por testigos de este voto, que me obligo a cumplir con todas mis fuerzas y voluntad. Tributaré a mi maestro de Medicina igual respeto que a los autores de mis días. Mi vida la pasaré y ejerceré mi profesión con inocencia y pureza. Cuando entre en una casa no llevaré otro propósito que el bien y la salud de los enfermos”.
Sin duda, hay muchos aspectos de este texto que han permanecido a través de los años y otros que han evolucionado, pero la esencia sigue siendo la misma a pesar de que la medicina, hoy día, se encuentra en un momento de grandes cambios y enormes avances en materia de genoma humano, ingeniería genética y biología molecular, entre otros aspectos.
Esperanza para los pacientes
Pero ¿qué es ser médico? Esta vocación se puede definir como el deseo ferviente de ejercer o estudiar medicina. No necesariamente para curar sino para conocerla, pero hacerlo con amor, con interés.
Por esta razón se puede entender que el verdadero médico no solo trata enfermedades o padecimientos, sino que se convierte en parte fundamental de la vida de sus pacientes. Un profesional que aconseja, que provee alivio y ofrece esperanza a sus pacientes.
Ser médico implica una responsabilidad que no todo el mundo está dispuesto a tener, pero al mismo tiempo ofrece la oportunidad de mejorar la calidad de vida de una sociedad mediante la orientación, la prevención, la investigación y el tratamiento adecuado de enfermedades.
El trabajo diario de los médicos en hospitales, consultorios, escuelas y centros de investigación, por ejemplo, es lo que permite que cada día más seres humanos cuenten con una mejor salud.
Ellos han demostrado, con sus acciones y dedicación, que aquel juramento del siglo V antes de Cristo sigue vigente hasta nuestros días, lo que se puede traducir como un inmenso amor y pasión que tienen por la medicina.
Por ello, este Día del Médico, es fundamental reconocer y celebrar la dedicación y el compromiso de todos los médicos que conforman Hospital Angeles Health System. Su trabajo incansable es crucial para la salud y bienestar de nuestros pacientes.
¡Felicidades!